Recientemente visité el muro de facebook de Alfonso León, quien tiene un programa en Venezuela "el arquitecto de sueños", y hallé en ese muro la frase que sirve de portada a este post, y creo que hay en esa frase un derroche de sabiduría que es muy oportuna de resaltar y comentar, y, en las ideas que fundamentan este post me explico al detalle.
Aún cuando una primera interpretación de esa frase, es la atinente a personas amargadas y frustradas, que viven "con la boca llena de pasado" en un mundo de irritantes nostalgias por recuerdos sin perdonar, no cabe duda que esa frase es muy útil a los efectos de evaluar el uso que los politiqueros hacen de la historia, para envenenar a las masas con discursos llenos de "odios del pasado", y es lo que me interesa desarrollar en este post; así que, de acá en adelante desarrollo esta línea interpretativa de esa frase.
Primeramente quiero decir que una de mis "delicias intelectuales" es el conocimiento de la historia. Personajes, hechos y dichos, de nuestra sabia historia, siempre ocuparán mi interés, e incluso mi quehacer como escritor bloguero. Incluso creo que nada es más apasionante que la HISTORIA UNIVERSAL, porque ella nos lleva al conocimiento de personajes ilustres, con un brillante palmarés intelectual y ético, digno de imitar.
Por tal razón, veo con mucha indignación el uso indebido de la historia para engañar y manipular a las mayorías; y, muy pero muy LAMENTABLEMENTE, los politiqueros de la actualidad se valen de la manipulación de la historia, para fines ideológicos perversos y destructivos.
Quiero ser enfático: la historia no es una herramienta para destruir o crear divisiones. Noooooo!!!!. Porque la historia es una herramienta de conocimiento, de valoración ciudadana, de creación de conciencia.
La historia cuando es manipulada con tintes ideológicos, no es historia, "ES BASURA". La historia de los pueblos es de máxima importancia, y, el primer indicio de respeto a un país, es el respeto a su historia. Querer manipular la historia, es querer atrapar en la gente, e impedirle ver con claridad el futuro y disfrutar del presente, y eso también es basura. El pasado simplemente fue un camino transitado, hay que dejar transitar el presente para aspirar transitar a un mejor futuro.
En virtud de lo precitado, e incluso, de los subsiguientes argumentos de este post, soy enfático en afirmar que "la historia es un valor social" de fundamental importancia, y es elemento fundamentalísimo en la formación de la ética ciudadana. Quiero recordar un artículo anterior en este mismo blog, donde cité elementos acerca de la historia como valor social, y lo puedes ver al hacer click acá.
Los polítiqueros actuales, presumiento de una falsa (y asqueante) intelectualidad, rellenan sus discursos de odio, manipulando la historia, y los desaciertos en algunos personajes de la historia de un país. De hecho, han popularizado la frase "NO VOLVERÁN" como recurso propagandístico para atornillarse en el poder. A esa frase le dediqué un post exclusivo y exhaustivo, lo puedes leer acá. Los politiqueros rebajan de tal forma la historia nacional, incluso a la propia historia universal, "que hacen de la historia, una historieta cómica", y esto, ¡es inaceptable!, ......¡BASTA YA!.
Siendo la historia un valor ético y social, apoyo 100% la reflexión de Alfonso León de evitar el relleno de los discursos políticos con "la boca llena de pasado", especialmente, si va en la orientación de crear polarización política y social, que tanto daño ha generado en la sociedad venezolana.
La historia es enseñanza. De manera que si el caso fuera hacer mención de errores de personajes del pasado, la idea es ver la enseñanza para no cometer otra vez esos errores, lo cual hace impropio el discurso de la descalificación de esos personajes, falla exponencialmente grave, si se toma en cuenta que es "de mala educación" hacer señalamientos de muertos que no pueden defender sus acciones, por viles que estas hallan sido.
La actualidad política me permite axiomatizar que "la mayor muestra de intelectualidad de un político, es respetar la historia de su país, y, no hacer uso ideológico-propagandístico de la misma con fines electoreros". Creo que debemos aprender a identificar a los falsos políticos, y, en el uso indebido de la historia, encontramos la VARIABLE NO. 1 para reconocerlos. Honestamente, un pueblo que se deja engañar con falsos discursos históricos, es un pueblo ignorante, por eso insisto, la enseñanza de la historia de tu país, es innegociable y no puede faltar en un pensum de estudios.
Hay que enseñar historia a nuestros niños. Y, eso además del conocimiento de hechos y personajes, también implica enseñar a respetar la historia. Lo digo así: tal como se enseña a valorar la historia bíblica en las Escuelas Dominicales, o en las clases de catecismo, así mismo, debe enseñarse a respetar el pasado de una nación.
La historia es una condición muy humana. Todos los humanos tenemos historia, y hacemos historia. La historia es un reflejo de las acciones pasadas de seres humanos. Evaluamos la historia, con un criterio humano teñido de dialéctica, ética, metodología, arqueologia, antropología, etc.
La interpretación y enseñanza de la historia, debe ser una acción profesional que se deje a los expertos en esa área, y que además cuentan con las herramientas metodológicas y la "sensatez profesional" para emitir juicios de valor.
Quisiera ser algo drástico: "Quienes manipulan la historia, creen que la historia es una prostituta que ellos pueden ultrajar a su antojo", .... suena drástico, quizás dramático, ¡pero es la pura verdad!. Concluyo con esta pregunta: ¿quieres que la historia de tu país sea la prostituta de oradores mediocres?, ....¡allí dejo la reflexión!.
.......Y, nunca olvides que:
Recuerda que para consultar sobre mis recientes publicaciones en éste y en mis otros blogs, puedes hacerlo consultando en mi twitter @blogsdeangelpaz. Gracias.
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