Me agrada sobremanera, toda película, todo texto, o toda imagen, que exalte la armonía humana. Es tan lindo cuando dos amigos se abrazan cuando se ven nuevamente, lo cual se ha convertido en una manifestación de afecto entre amigos, y que en muchas ocasiones complementan el abrazo con un beso fraternal. Y, es tan bien visto, cuando acompañamos ese abrazo tan amigable con un sencillo saludo, como el muy conocido: ¡Buenos días!, no obstante, no es lo que se ve en la realidad en muchas personas, y es lo que se aborda en este post.
Se ha perdido la costumbre de dar los buenos dias. Incluso de contestar los buenos dias. Hoy dia son la excepcion los que dan los buenos dias. Antes, eran la excepción los que no daban los buenos dias. Hoy dia se ve "normal" no dar los buenos dias, antes era lo "anormal".
Los buenos días representan un signo de cortesía y buena educación. muestran el respeto y consideración que damos a los demás para recibir en consecuencia un trato semejante.
Lastimosamente, en personas mal llamadas educadas, que reciben la mejor educación de costosos planteles de educación privada, sólo se reservan esos modales, para la usanza con personas de su mismo nivel socioeconómico. Es que me asombra ver a personas adineradas totalmente indiferentes a dicha norma de cortesía, a no ser que se encuentren con otra persona también adinerada.
La buena educación no es para exhibirla ante la gente adinerada, o ante personas influyentes. Porque la buena educación, es un estilo de vida que se fundamenta en respetar el derecho de los demás para aspirar a recibir nosotros el respeto recíproco correspondiente.
Entre los jóvenes de hoy, ocurre una peor aberración: es que ni siquiera se dignan en contestar los buenos días, sobre todo si proviene de un anciano, que es otro síntoma que refleja decadencia social, como lo es la irreverencia a personas de la 3era. edad.
Debe quedar explícito que "una persona con carencia de normas mínimas de urbanidad, es una persona MAL EDUCADA", y no es responsabilidad de los centros educativos a los que asistió, sino que refleja una clarísima ausencia de buena formación familiar, de manera que no solo habla mal de si misma sino de su propio grupo familiar.
Y, no dudo en afirmar que la indiferencia al saludo en empresas que tienen que tratar con el público es exponencialmente más grave, no sólo en el empleado con semejante falta de educación sino incluso en la misma empresa que contrata o permite en sus empleados comportamientos tan distanciados de la etiqueta social mínima..... porque asi como es tan importante el realizar una tarea eficientemente, también lo es el tratar eficientemente a terceros, llámese compañeros de trabajo, clientes, proveedores o cualquiera vinculado con nuestra empresa, porque es parte de la buena imagen de la empresa (véase que esa imagen corporativa se vincula con buena educación de sus empleados) y es ingrediente para una sana relación interpersonal.
No menos importante es resaltar la tendencia de muchas personas que a través de las redes sociales comparten imágenes editadas con textos muy motivadores, de esos que levantan el ánimo, te recargan de optimismo y hasta te dibujan en el rostro un sonrisa de felicidad. La siguiente imagen es un ejemplo de lo dicho:
La idea general de este post, es rescatar la sana costumbre social de valorar nuestras amistades con la belleza del saludo, un buenos días, o buenas tardes, o buenas noches, según sea el caso. Además de expresar urbanidad, también reflejas la riqueza interna de tu persona, al privilegiar por sobre cualquier diferencia, el respeto y la tolerancia hacia los demás.
Tambien puedes ampliar más este tema clicando los siguientes enlaces complementarios:
Lecturas recomendadas:
1. Buenos días, ¿protocolo o técnica?
2. Saludo y diplomacia
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